El hábito de la Cofradía consta de túnica y capa de color rojo vivo, capirote negro en terciopelo, cíngulo, calcetín, guantes y zapato negro. En el lateral izquierdo de la capa luce una cruz gringolada en negro y en el centro del capirote, a modo de peto, otra en rojo.
En tela de color rojo vivo, rematada en cuello ajustado de fieltro de color negro, con sobrepuños de encaje negro, sobre la bocamanga, con un ancho aproximado de 12 centímetros y una tira de botones negros cerrando la parte delantera desde el cuello hasta el bajo.
En tela de color rojo (la misma que la túnica), rematada en cuello ajustado de fieltro de color negro. Ésta capa lucirá en el lado izquierdo, la cruz gringolada, emblema de la Cofradía en color negro.
En tela de terciopelo negro, con una forma marcada a modo de peto y cubre espalda circular, portando la cruz gringolada emblema de la Cofradía en color rojo, situada ésta en la parte central del peto.
En cordón negro trenzado, con borlas en ambos lados.
Negros. Como excepción, se autoriza a las Hermanas ataviadas de mantilla, que acudan a la procesión del Domingo de Resurrección, con guantes blancos.
De color negro sin hebilla.
La medalla ha sufrido variaciones a lo largo de su historia, siendo ésta la actual.